Supongo
que alguna vez que otra habrás tenido que dar respuesta a esa sutil pregunta
de: “y tú, ¿qué te llevarías a una isla
desierta?”
Tras un tiempo prudencial
en el que uno se da cuenta de lo difícil que es escoger algo verdaderamente útil
de entre los objetos que nos asedian en nuestro
día a día, al final casi todos mencionamos las mismas cosas terrenales: algún
libro para combatir la espera, la foto de algún familiar para mitigar la
nostalgia, una rebequita por si refresca por las noches,…
Si el encuestado
en concreto tiene raíces scouts, ese tiempo de espera y meditación se reduce de
inmediato, ya que aunque haya dejado de guardar silencio cuando el jefe de
grupo levantaba su mano derecha en una plaza de campamento, acumula bajo su piel
marchas, turnos de guardias y algún que otro susto compartido por las “Noches
del Terror”, sabiendo de sobra que en su mochila no podrían faltar objetos
tales como un rollo de cuerda de pita, un buen machete, un par de mosquetones,…
y un pañuelo que se anudará al cuello y que se denomina pañoleta.
Una pañoleta en
cuyo borde podremos encontrar cosida una promesa y un compromiso, tanto con el
Movimiento Scout Católico, como con la sociedad en la que estamos inmersos, pues
le duela a quien le duela, este grupo -perdón, los miles de Grupos Scouts que
hay diseminados por todo el Mundo- es un movimiento que pertenece a la Iglesia,
si, si, ¡a la Iglesia!, y se dejan la vida enseñando y educando en valores como
el honor, la confianza, la lealtad; el servicio, la alegría, la amistad; la
obediencia, el respeto a lo ajeno, el trabajo;...con la que está cayendo.
¿Ustedes creen
que las mentes poligráficas de Telecinco han pensado realmente en potenciar,
desarrollar y favorecer estas consignas educativas?
Por eso, de sus
cuellos, ya están sobrando esas pañoletas.
No he visto ese programa pero es que Tele 5 me chirría siempre pero lo que oigo sobre él no es nada alentador. No le calculo mucho en antena.
ResponderEliminarBesos, Alberto