Ir al contenido principal

Entradas

La espera llega a su fin.

Hace un par de meses mi madre nos confesó que le gustaría despedirse en persona de Nuestra Madre y Señora del Traspaso antes de que se la llevaran de nuevo para que pudieran afrontar la segunda parte de su restauración. Tenía algunas cosas que contarle. Una vez elegido el día y aparcado el coche, nos dirigimos hacia la capilla y esa tarde noté que su andar presentaba un ritmo mas animado y risueño que el de costumbre, y pensé –equivocadamente-, que tendría prisas por ir a verla y volver temprano a la rutina de su casa. Al llegar a la puerta de la capilla, fue la primera en darse cuenta de que nuestra Virgen no aguardaba su marcha en el altar principal, y sin que nadie le dijera nada intuyó que el lugar que ocuparía en esos momentos sería uno alejado de focos y de miradas curiosas. Una vez que se acercó hasta donde la Virgen reinaba, se topó de frente con una Madre despojada de alhajas, carente de corona o bordados y desprovista de maravillosas sayas, volviendo a desc...

Se desangra.

Lo llamé todo el fin de semana, pero no logré hablar con él. Desmoralizado tras la última llamada no respondida, decidí que me acercaría hasta su casa el lunes, aunque tuviese que desviarme de mi camino. A esas alturas eso era lo que menos me importaba. Solo quería saber cómo estaba, cómo se encontraba, cómo respiraba aquel corazón que dejé palpitando con dificultad sobre la baranda de su balcón, cuando el atardecer coqueteaba con las gaviotas, antes de marcharse a descansar. Después de pulsar repetidas veces el telefonillo, al fin me contestó. Por un momento dudé si esa voz que había escuchado era la de él, pero conocía bastante bien la coletilla con la que siempre saludaba. Una vez en el portal y mientras esperaba al ascensor, seguía pensando en esa voz que había escuchado segundos antes. Sabía que era la de él, sí, pero estaba rajada, descosida, alguien había agrietado esas cuerdas vocales con cuchillas afiladas de dolor y desamparo. No tuve necesidad de ver al dueño de esa voz p...

POR CALLE JUSTICIA

VEO PASAR TU SUFRIMIENTO ACOMPASADO EN UNA PLAZA CUYAS PALMERAS SE AHOGAN PUES ELLAS SABEN, MEJOR QUE NADIE, QUE EN UNAS HORAS SERÁ TU CUERPO INERTE EL TRASLADADO. TE ACERCAS AL BORDE DE MI MEMORIA Y SIENTO TU ESCARNIO GALOPAR SOBRE MI PECHO; ¿QUIÉN PUDIERA, A ESTAS ALTURAS, DETENER EL TIEMPO Y EVITAR ASÍ EL DESTINO DE NUESTRA HISTORIA? PERO AMPARÁNDOME EN QUE SÓLO SOY LO QUE SOY DE BRAZOS ME CRUZO CUANDO TÚ CRUZAS LA CALLE , COMO TANTA VECES HAGO, PUES A DIA DE HOY, SIGO SIENDO EL MISMO COBARDE, QUE SE PIERDE EN LOS DETALLES. Y ASÍ TE VEO CAMINAR, RESIGNADO ASUMIENDO UN FINAL QUE A OTROS, APRISIONAN. CONTROLANDO LA ESPERA , CALMADO SABEDOR QUE PRONTO PASARÁ TU HORA. UNA HORA EN LA QUE TODO SE HABRÁ CONSUMADO VOLVIENDO A RELUCIR LA SINRAZON DEL HOMBRE PUES EL MISMO QUE ACLAMÓ AL MESIAS ESPERADO HOY PREPARA SU MUERTE, RODEÁNDOLA DE REPROCHES. LOS MISMOS QUE ENTONAMOS Y SACAMOS A RELUCIR CUANDO NUESTROS RUEGOS...

AL DESPRENDERSE DE SU ENVOLTURA...

Levantaremos murallas con almenas que sonrían, sonreiremos cuando sus pies se bañen en dulzura, enjuagaremos nuestras pieles con perfumes de ternura, brindaremos con ella cuando nos visite al mediodía. Vestiremos con encajes de fiesta a la tristeza, le daremos la mañana libre al desahogo, ajustaremos la alegría, hasta que consigamos el tono; colgaremos guirnaldas a la luna ampliando su grandeza. Saldremos a la calle con coloretes en la cara, venceremos al sueño paseando entre recuerdos, confiaremos nuestra suerte para que la propaguen los vientos, no permitiremos que el cansancio gane la batalla. Danzaremos alrededor de hogueras primaverales, nos tomaremos de su cintura al resurgir la pereza, acariciaremos palabras que denoten su belleza, suspiraremos al recordar aquellos encuentros pasionales. Y cuando el Sol, reconcomido de celos, nos pregunte el por qué de tanta fiesta, señalaremos a nuestro corazón latiendo po...

TE ENCONTRÉ

Una tarde de invierno, arropado entre pliegues de desconfianzas y de apatía, me asomé al balcón del miedo a escribir, y allí la encontré, dormidita al arrullo de los recuerdos. Desde ese día, sé que está ahí, la siento cerquita de mi corazón; su sonrisa me tiende la mano, su alegría me anima a luchar por mi sueño, su aliento me alienta en cada verso, en cada rima, en cada letra. Es mi pequeña, un tesoro que tengo que cuidar, por eso la quiero tanto. PRESENTO MI VOZ A MEDIA NOCHE INCLINO MI CABEZA ANTE SU SOMBRA PREGUNTO, SUGERENTE Y SIN REPROCHES SONRÍO ANTE SILENCIOS QUE LA ASOMBRAN. PRETENDO CONOCERTE, SUPERAR LA DISTANCIA COMPARTIR TUS MIEDOS, TU VIDA, TUS ANSIAS; CONFÍA EN ESTE ESCRIBA DE LA PALABRA ELLAS DESNUDARÁN LOS SECRETOS DE MI ALMA. EXPONGO EN CADA GESTO LO QUE SOY SUEÑO QUE PIERDES EN MÍ, TU MIRADA ME CONFORMO CON QUE SONRÍAS HOY DEMOSTRARÉ QUE NO ESCONDO NADA. EL TIEMPO JUEGA A MI FAVOR EL DESTINO ELEVA SU IMPORTANCIA, SACUDES...

Hoy es 24 de Mayo.

Rendido a tus plantas me ofreciste tu mano el tiempo que la niñez a uno lo vestía, despidiéndome con un beso al llegar el mediodía intuyendo que jamás me separaría de tu lado. En los muros del Oratorio fui creciendo me enseñaron a quererte un poquito cada día siendo aquel legado la mayor alegría cuya huella no puede borrarla ni siquiera el viento. Iba a verte cada mañana a tu capilla me acomodé en tu auxilio haciéndome un hombre mi corazón se desboca al pronunciar tu Nombre, germinó en mi interior la fragancia de tu semilla. Llevo por bandera el ser Salesiano es mi faro la estela de tu estrella la mas radiante, la mas sencilla, la mas bella, la que debería de guiarnos a todos los cristianos. Para aquellos que te pusieron en mi camino solo tengo palabras de agradecimiento pues sin darse cuenta reforzaron los cimientos, siendo Tu sonrisa el mejor de los destinos. Sabes que me ofrezco a Tí confiando mi cuerpo y mi alma compartié...

CUANDO CUENTO COMO FUE

CUANDO NUESTRAS MANOS SE ROZARON, NUESTROS LABIOS SE BESARON, NUESTRAS PIELES SE MOSTRARON Y NUESTROS GEMIDOS SE ESCUCHARON. CUANDO NUESTRAS MIRADAS SE BUSCARON, NUESTROS MIEDOS SE ESCAPARON, NUESTRAS LENGUAS SE DESEARON Y NUESTRAS CARICIAS SE ENCONTRARON. CUANDO NUESTROS SUSPIROS SE AMARON, NUESTROS SECRETOS SE DESVELARON, NUESTROS PASADOS SE CICATRIZARON Y NUESTROS FUEGOS SE APAGARON. CUANDO NUESTRAS COSTURAS SE ENFRENTARON, NUESTROS SILENCIOS SE PRONUNCIARON, NUESTROS ESCALOFRÍOS SE ROBARON Y NUESTROS PERFILES SE EXTRAÑARON. CUANDO NUESTROS CAMINOS SE SEPARARON, LAS HUELLAS DE LA ILUSIÓN, AHOGAMOS Y ENTRE REPROCHES, DILAPIDAMOS LA FELICIDAD QUE TANTO RESPIRAMOS. CUANDO ES TU NOMBRE EL SUSURRADO, EL TIEMPO A TU LADO ES RECORDADO, Y AL SER TU RECUERDO EL EVOCADO, EN MIS LABIOS - UNA SONRISA-, SE HA DIBUJADO